La personalidad influye en el estado de animo

Conforme pasa en tiempo y vamos acumulando experiencias, también vamos cargando nuestras espaldas con lo que podríamos llamar el saco de los recuerdos. Algunos de esos recuerdos son positivos mientras que otros son negativos y están asociados a emociones como tristeza, miedo, ira, vergüenza, etc. Lo que hacemos con ellos cuando surgen en nuestra mente está relacionado con la personalidad, el género y las estrategias utilizadas para manejarlos.

Las personas con una alta tendencia a centrarse principalmente en emociones negativasestán más predispuestas a padecer problemas de ansiedad y depresión.

Cuando las personas recuerdan sucesos negativos tienden a utilizar estrategias para regular las emociones que esos recuerdos producen. Estas estrategias son principalmente dos: la supresión, que consiste en tratar de eliminarlas de la mente y no sentirlas, y la reevaluación, que consiste en adoptar un nuevo punto de vista respecto a los recuerdos desagradables.

Varios psicólogos de la Universidad de Illinois han estudiado cómo influye la personalidad en el estado de ánimo, cómo manejan las personas sus recuerdos y las estrategias más efectivas para que no nos afecten en exceso.

Resultados del estudio:

- Las personas extrovertidas de ambos tienden a recordar más sucesos positivos que negativos.

- Las personas de ambos sexos se sienten peor después de recordar sucesos negativos.

- Los hombres con puntuaciones altas en las escalas de neuroticismo tienden a recordar más sucesos negativos que los hombres con puntuaciones bajas en esta escala. Mientras que las mujeres con puntuaciones altas en neuroticismo tienden a volver al mismo recuerdo negativo una y otra vez (es lo que se conoce como rumiación). La rumiación suele estar asociada con el estado de ánimo deprimido. "Las personas deprimidas recuerdan esos sucesos negativos y, como resultado, se sienten tristes. Como consecuencia de sentirse tristes, tienden a tener más recuerdos de sucesos negativos. Es como un círculo vicioso."

- En las mujeres, la supresión de las emociones estaba muy relacionada con un mayor recuerdo de sucesos negativos y un estado de ánimo decaído tras recordarlos. En los hombres, en cambio, la supresión no parecía producir un aumento de recuerdos negativos.

- Las personas que tendían a hacer un esfuerzo por pensar de modo diferente sobre sus recuerdos tenían más probabilidades de recordar más sucesos positivos que el resto.

Lo que podemos deducir de estos estudios es que nuestros recuerdos, así como el modo como los manejamos, influyen en nuestro estado emocional y bienestar emocional. Ser más extrovertido, interrumpir la rumiación y recurrir a la estrategia de la reevaluación, parece ser el mejor modo de manejar los recuerdos negativos y favorecer más los positivos.

Fuente: Motivaciónabout.com